Utilidad o belleza

Cuando la elegancia no es la preocupación en materia de bicicletas, como en la vida, a veces lo que importa es el el valor de uso que le damos a las cosas.
Aquí no se trata de una luz de leds, no se mide su desempeño en lumens, como si habláramos de una sofisticada lámpara de Cateye, sino de la función esencial de una lámpara, iluminar, sea para que te vean o para ser visto.
Tampoco hablamos de una parrilla fancy con una caja de súper, sino de cumplir las necesidades esenciales, basta adaptar una pequeña caja de plástico rígido y voilá, nuestro velocípedo tendrá alas para volar con su carga a donde se requiera.
Así que a veces, la belleza se encuentra en lo simple ¿o no?

El otoño de la bici que parece primavera


Este domingo 22 en México y en el hemisferio norte terminó un verano difícil y arrancó el otoño que, a pesar de ser comúnmente sinónimo de envejecimiento, de ocaso, en este caso se trata de la mejor temporada del año para la promoción de la bicicleta y la movilidad.

Voy a ponerles un pequeño calendario de muestra para que se den una idea somera de todas las actividades que vienen  y que para mí dan pie a este otoño que parece primavera.

SEPTIEMBRE
22 Día Mundial sin auto
22-25 #BicifestMH Festibal de la bicicleta en Miguel Hidalgo
25 Noche de Museos, rodada
29 Ciclotón

OCTUBRE
24-27 Sexto Congreso Nacional de Ciclismo Urbano en Morelia, Michoacán
27 Ciclotón

NOVIEMBRE
6-10 Bicycle Film Festival

Además, hay muchas otras actividades que pueden consultarse en la agenda semanal que sube Cletofilia, por ejemplo, una de las más completas y en la innumerable cantidad de blogs y cuentas de twitter y FB que hay sobre el tema del ciclismo urbano.

Así, que a disfrutar de este otoño, porque la bici viene rodando recio.

Un compromiso periodístico con la movilidad

Por Héctor Zamarrón*
Ciudad de México, Septiembre 12, 2013
Ser periodista es una elección que equivale de inmediato a comprar boleto de primera fila para la historia.
Si algo tiene de bello esta profesión es esa posibilidad de permitirnos presenciar, como testigos privilegiados, los acontecimientos que otros leerán o escucharán de parte nuestra a través de los medios.
Pero como los privilegios no llegan nunca sin obligaciones, esa cercanía con la realidad también nos compromete a reportarla, a transmitir con fidelidad nuestras observaciones, a cuestionar la misma realidad que tenemos enfrente y, sobre todo, a contrastarla con lo que ocurre en otras partes del mundo, en otras ciudades.
Nuestra posición como periodistas ante la sociedad equivale a la de aquellos exploradores de la antigüedad quienes, al regreso de sus viajes por los confines más remotos de la Tierra, sacaban de sus alforjas objetos extraordinarios y por las noches, al calor del hogar o reunidos en torno a una fogata, relataban historias extraordinarias, casi increíbles a no ser porque podían acreditar cada una de ellas con sus recuerdos, anécdotas y con los viajes de otros más tarde a los mismos lugares.
Reportar la movilidad hoy en día y los fascinantes temas que a su alrededor se despliegan es un privilegio y un compromiso para nosotros los periodistas frente a ustedes: actores, investigadores, funcionarios, políticos, activistas.
En los medios tenemos que valorar doblemente la posibilidad de escribir sobre las tendencias y prácticas asociadas a este nuevo derecho humano que recuperamos, el derecho a la movilidad, gracias al estado tumefacto que adquiere el tráfico en nuestras ciudades.
Reportar la movilidad es también asomarnos a esa parte de la sociedad que es más sensible a la adopción temprana de cambios, donde observamos como primicia lo que más tarde puede volverse general.
Si antes era raro en la ciudad de México ver a un clasemediero en bicicleta, ahora no lo es tanto gracias a la promoción intensa que se ha hecho de ese medio de transporte en los últimos años, pero también a la lucha que individuos y organizaciones dieron para que esto fuera posible (Bicitekas e ITDP, entre ellos).
La presencia de la bicicleta en la ciudad casi despareció para los medios de comunicación porque los usuarios comunes –mensajeros, repartidores, obreros, comerciantes— permanecieron invisibles para quienes sólo tenían ojos para los automóviles.
Porque en estos tiempos en que la política y, sobre todo, la toma de decisiones en políticas públicas, pasan obligatoriamente por la discusión en medios, por la esfera pública de la que los medios son parte sustancial, si un tema se deja fuera es como si no existiera.
Por eso da gusto encontrar decenas de periodistas que a contracorriente hacen suyos los temas de la movilidad sustentable, que observan el uso de la bicicleta en los barrios más tradicionales, como Xochimilco y Tláhuac y redescubren realidades que habían quedado opacadas por la supremacía del automóvil.
Son estos periodistas, también, quienes visibilizan a una comunidad herida por la violencia que aqueja a todo el país, como es La Laguna, pero que en este caso usa las bicicletas y los paseos como una forma de contrarrestar ese miedo que anula la ciudadanía y las bicicletas, mariposas que son, se convierten en un desafío a quienes predican el credo de la muerte.
También es a través de las crónicas periodísticas como cobra dimensión la complejidad que implica deshacerse de ese obsoleto y caprichoso sistema de transporte que son los microbuses, populares hace años, en decadencia hoy en día.
Asomarse a los trabajos participantes es observar una incipiente generación de reporteros y cronistas que a diferencia de las tendencias dominantes, decidieron voltear a los temas de movilidad contando historias inspiradoras, reveladoras, críticas, que mueven a replicar lo aprendido.
Periodistas que al leerlos refuerzan mi convicción, cuando me preguntan si ha sido difícil mantenerse en estos temas, impulsarlos, pelearlos dentro de las redacciones, entrenando reporteros, sólo contesto, ha valido la pena, tanto como la invitación que nos hizo el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo para convertirnos en jurado de este premio.
Felicitaciones a los ganadores --Iván Ramírez, Dulce Ramos y Jesús Guevara, ganador y menciones--, así como un agradecimiento al resto de los integrantes del jurado: Onésimo Flores, Claudia Muzzi, Patricia Martínez y Verónica Ortiz, quienes otorgaron el premio tras revisar decenas de trabajos, basado en los criterios de la convocatoria; originalidad, manejo de fuentes, claridad, estilo y redacción, así como el impacto y aplicación local.

* Intervención en la entrega del Premio de Periodismo en Movilidad 2013 del ITPD